La copita menstrual comienza a hacerse conocida y su información circula y se comparte cada vez más entre mujeres, pero no es nueva. Esta forma de higiene femenina ya tiene casi un siglo, pero aggiornada, comienza a consolidarse como una nueva opción.
Eldoce.tv habló con la médica tocoginecóloga Mariela Klor (MP 30403/4), quien remontó la historia del producto. “Anteriormente eran de otros materiales. Se dejó de usar porque tiempo atrás hablar de la menstruación era tabú, la mujer no estaba interiorizada con su cuerpo y el sangrado. Y los materiales eran más duros y molestaban. Estaban hechas de caucho”, explicó.
Por qué se volvió a usar
“La historia cambió, las mujeres cambiaron su pensamiento, aceptan la menstruación como algo fisiológico, como debe ser. Y la copita que tenemos hoy es un producto cómodo para la higiene femenina. Está hecha de silicona”, agregó la doctora Klor.
Características y ventajas
La copita es un dispositivo de silicona, por lo que evita las reacciones químicas que producen las toallitas o tampones.
Es reutilizable, no se desecha (en la misma y otras menstruaciones). Dura entre 8 a 10 años, de acuerdo a la marca, por lo que tiene un impacto positivo en el medio ambiente. Se lavan y pueden usarse durante ocho horas seguidas. Y se esterilizan antes de empezar un nuevo ciclo.
Tiene forma de campanita y hay de diferentes tamaños.Tienen que ver con la dimensión de la vagina de la paciente y con la cantidad de sangrado.
También hay una ventaja económica. Una copita cuesta entre 1.100 y 3 mil pesos (quienes la usan, se ahorran el dinero invertido en toallitas y tampones).
Cómo usarla: el video
La doctora Klor hizo una demostración con un prototipo de cómo colocar correctamente la copita y cómo retirarla. Mirá cómo hacerlo:
Consejos para descargarla de manera higiénica
La ginecóloga explicó que no hay ningún riesgo a la hora de manipular la copita cuando hay que descargarla y reutilizarla, mientras las manos estén limpias. También dio consejos sencillos para hacerlo de manera más segura.
Transición y adaptación de un método a otro
Cada paciente tiene su curva de aprendizaje. Para unas será un ciclo, para otra dos, tres o cuatro. Recomiendan hasta adaptarse, usarla con una toallita femenina, para sentirse más segura.
Posible fracaso
Puede que para algunas mujeres no funcione y esto puede darse por varios motivos. Porque sienta que no es para ella: no se acostumbra, la incomoda, entre otros. Entonces a esas pacientes les quedará seguir con los tradicionales métodos disponibles de higiene femenina.
Compatibilidad con métodos anticonceptivos
En el caso de que una mujer tenga puesto un DIU (dispositivo intrauterino) debe asegurarse de tener los hilos cortos. “Puede pasar que la paciente traccione sin querer los hilos del DIU si los tiene largos, y en ese caso debe consultar al ginecólogo para que chequee cómo están y en todo caso, se los corte un poco para que no interfiera la copita”, detalló.
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“No es novedoso, pero ahora se puso de moda y resurgió por el tema ecológico. A nosotros como médicos, que sea de silicona y hipoalergénico es muy bueno. Hace que las pacientes que sufren de dermatitis de contacto, vulvitis de contacto por el uso o abuso de tampones y toallitas, lo eviten y sin que la paciente se manche con el sangrado”, apuntó.
“Son muy aceptadas, quienes las usan están contentas y las recomiendan a sus amigas, que nos preguntan en las consultas qué opinamos. Muchos ginecólogos estamos satisfechos”, concluyó la doctora.