El brutal femicidio de Lis Funes, ocurrido esta madrugada en un barrio cerrado de La Calera, conmovió a toda la provincia. No solo porque se trata del quinto femicidio en Córdoba en lo que va del año. También por el recuerdo de la mujer de 43 años.
Ella era abogada y amaba la música. En la escuela Atilio Argüello, donde trabajó 16 años, daba música y dirigía el coro. En el pizarrón de una de las aulas quedó escrita la letra de la guajira "El negro mar". Lis la había enseñado ayer.
Sus colegas del colegio destacaron que era muy comprometida, alegre y apasionada. En el establecimiento decretaron un día de duelo por el crimen de Lis, por lo que no habrá clases este jueves.
La docente luchaba contra los casos de violencia de género y había denunciado varias veces a su exnovio, el asesino. Terminó siendo una víctima más.