Lis Grisel Funes estaba a punto de cumplir 44 años. Era abogada y había estudiado música en el Instituto Domingo Zípoli. Actualmente era profesora en las escuelas Primer Teniente Ávila y Atilio Argüello. Además, era ferviente luchadora contra la violencia de género. Tenía motivos de sobra.
Esta madrugada, dormía con su pareja, Damián Lazo, en su casa del barrio cerrado La Estanzuela cuando su ex novio saltó el cerco perimetral, entró a la vivienda y los acuchilló. Ella no logró sobrevivir y él fue internado con varias heridas.
El autor del crimen, Elías Lesta, había sido novio de Lis y convivido con ella en esa misma casa durante el año 2014. La mujer lo dejó por violento. "La he visto con las marcas en los golpes. Vivía un infierno y tenía miedo", nos contó una profesional que la atendía.
En febrero del año pasado había roto la barrera de salida del country y, en septiembre, había ingresado sin autorización. Por eso, tenía orden de restricción para acercarse a la vivienda. Además, la mujer lo había denunciado decenas de veces, la última en el día de ayer.
¿Se podría haber evitado el crimen? La pregunta nos surge después de ver el impactante informe de Roxana Martínez para Noticiero Doce: