La máxima rozó los 37 grados en la ciudad de Córdoba después de las 13, pero las nubes cubrieron el cielo y el calor la temperatura comenzó a descender. Las lluvias llegaron alrededor de las 14, pocos minutos después de que el Servicio Meteorológico Nacional emitiera una alerta.
El aviso a corto plazo por tormentas fuertes con ráfagas y ocasional caída de granizo afecta a los departamentos del centro de la provincia: Córdoba, Colón, Ischilín, Punilla, Río Primero, Río Segundo, Santa María, Totoral y Tulumba.
La alerta rige hasta las 18.24 de este miércoles. A pesar de las precipitaciones, el calor seguirá agobiando a los cordobeses durante al menos un día más. El jueves, la máxima alcanzaría los 36 grados y no se prevén lluvias.
El viernes cambia definitivamente el tiempo. Se prevén tormentas durante toda la jornada y la máxima no superaría los 25 grados.