"Ahora entiendo lo que le pasó a los papás de Loriana", expresó con profundo dolor y lágrimas en sus ojos Ricardo, el marido de Silvia Apaza. Vecinos marcharon por las calles de barrio Congreso para pedir justicia y más seguridad.
"Tengo que seguir de pie, luchando, por mis dos bebés"
La mujer de 31 años fue asesinada de un disparo en la cabeza por motochoros cuando esperaba el colectivo en la madrugada de este miércoles. Trabajaba como empleada de limpieza en una clínica privada de la ciudad.
"Hay que sacar fuerzas. Tengo que seguir de pie, luchando, por mis dos bebés", siguió devastado Ricado. Aún no hay detenidos por el crimen, pero siguen subiendo los arrestados por violar la cuarentena por la pandemia del coronavirus. "No me han comunicado nada, no entiendo nada porque nadie dice nada. No sé qué habrá pasado. Fui a buscar las pertenencias y no me las dieron", reclamó.
Los vecinos aseguraron sentirse desprotegidos. Uno de ellos relató cómo la encontró después del robo: "Me iba a trabajar y en eso se frena un auto adelante y veo al costado había una chica tirada en la calle". Sin dudarlo, se acercó, observó que no hubiera nadie escondido y se dio cuenta que Silvia no respiraba. "Me bajo del auto para tratar de reanimarla, la toco y veo toda la cara ensangrentada", detalló.
"Me bajo del auto para tratar de reanimarla, la toco y veo toda la cara ensangrentada"
"A las 05.34 llamé a la Policía y tardó 13 minutos. A tres cuadras está la comisaría y no venía el patrullero", se quejó indignado al recordar la imagen de la mujer muerta.
+ VIDEO: la marcha en barrio Congreso