Martín no olvidará jamas el lunes 11 de enero de 2016. No fue un día más para este empleado de una arrocera de la localidad santafesina de Cayastá. Esa mañana, debía comenzar la jornada revisando los galpones. El dueño, de vacaciones en Brasil, le advirtió que no vaya sólo por temor a los prófugos que buscaba todo el país. Él avisó a un amigo de la policía local y se mandó. Cuando estaba allí, se encontró con Cristian Lanatta y Víctor Schillaci.
"Me siento en un tractor y aparecen ellos, me apuntan con las armas", cuenta Martín, sobre el momento en el que los ve por primera vez. Según el empleado le pidieron las llaves de los camiones y le preguntaron por las cámaras de seguridad que filmaban el lugar.
Además, relata que tenían chalecos de Gendarmería y que le pedían agua, comida y hasta que les cebara unos mates. Por suerte, aparecieron los policías.
Lo más insólito es que los prófugos tenían tanto hambre que abrieron la heladera del galpón y le pidieron que les haga un asado con pedazos de carne y huesos que eran para los perros.
Mirá el video con el relato de Martín Franco, el último rehén de los prófugos que buscaba el país: