Victor Flores será indemnizado por la Provincia de Córdoba con 39 millones de pesos por el crimen de su hijo Ale Flores, ocurrido en 1991. Dos policías lo atropellaron en Río Cuarto y ocultaron su cuerpo hasta 2008, cuando fue hallado enterrado.
“No nos va a devolver la vida de mi hijo”, aseguró Flores en Noticiero Doce sobre la resolución de la Justicia por daño moral y pérdida de chance que le ocasionaron. “Fue una de muchísimos años, de muchísimo tiempo”, expresó y siguió: “Sin ninguna duda que va a marcar un precedente a nivel nacional para otras causas”.
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Victor Flores se sinceró y afirmó que “el dinero no interesa” porque no pudo “meter detrás de la reja” a los culpables, Mario Luis Gaumet y Gustavo Javier Funes. Además, comentó que como familia consideran “haber hecho lo correcto, lo que corresponde como ciudadanos damnificados con un hecho aberrante”.
Más de 15 años
El papá de Ale Flores confesó que todos los días de su vida le pedía a Dios encontrar a su hijo “antes de que me fuera de esta tierra”. “La lucha me llevó más de 15 años, pero poder encontrar a mi hijo para que descanse en paz es lo fundamental, es el propósito que quería”, expresó.
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En esa línea, apuntó contra el primer fiscal que tuvo la causa: “Se dedicó a perseguirme porque tenía favores debidos a la cúpula policial que actuó en ese momento”. “Se tapaban las cosas entre ellos”, denunció.
Desaparición, misterio y muerte
El 16 de marzo de 1991 Alejandro Flores desapareció en medio de una tormenta en Río Cuarto. El niño de cinco años fue buscado durante días por vecinos pero sin apoyo policial.
Durante 17 años, su familia vivió con la incertidumbre de no saber qué le había ocurrido. Hasta que en 2008 un vecino encontró huesos en un baldío y fueron sometidos a exámenes de ADN. No hubo dudas: eran de Ale. También se confirmó que tenía lesiones en las costillas, quebraduras en una muñeca y en la clavícula derecha y hundimiento de tórax, compatibles con el accidente.