La policía terminó la guardia y emprendió el regreso a su casa en su auto Renault Clio. Pero en el trayecto se cruzó con delincuentes. La agente de 23 años intentó impedir el robo, abrió fuego e hirió a un vecino. En ese contexto, quedó imputada por abuso de arma de fuego.
De acuerdo a lo que informaron fuentes policiales, la uniformada advirtió cómo delincuentes en moto robaban una bicicleta de una vivienda, ubicada sobre calle Vulcán al 7.400, en barrio Villa Cornú.
Según la versión policial, dio la voz de alto y frustró el robo. Los ladrones siguieron la huida, pero dejaron tirada la bicicleta. En medio de la persecución, la policía efectuó al menos dos disparos cuando vio que uno de los motochoros “realizó ademanes de esgrimir un arma de fuego”.
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Sin embargo, el proyectil alcanzó a un hombre de 65 años que ocasionalmente caminaba por la zona. Se trata de un vecino del barrio que vive a pocas cuadras donde ocurrió el hecho. Los ladrones desaparecieron del radar y están prófugos.
La víctima resultó con una herida superficial en la axila izquierda. La agente lo auxilió mientras aguardaba la llegada del servicio de emergencia. El hombre fue trasladado al Hospital de Urgencias donde lo asistieron y a las pocas horas recibió el alta.
Qué dice el artículo 104 del Código Penal
Desde la Fiscalía de Instrucción del Distrito cuatro Turno seis informaron a ElDoce.tv que la integrante de la fuerza de seguridad fue imputada por el artículo 104 del Código Penal por abuso de armas.
La ley establece que "será reprimido con uno a tres años de prisión, el que disparare un arma de fuego contra una persona sin herirla".
Además, remarca que esta pena "se aplicará aunque se causare herida a que corresponda pena menor, siempre que el hecho no importe un delito más grave".
Y agrega: "Será reprimida con prisión de 15 días a seis meses, la agresión con toda arma, aunque no se causare herida".