La noche del 16 de septiembre, la vida de Facundo Osores cambió para siempre. Era sábado. Con sus suegros, su novia y un primo de ella, viajaban de Córdoba, adonde viven, hacia Villa María de Río Seco. El motivo era asistir al casamiento de otro primo.
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Pero un terrible accidente que protagonizaron a la altura de la Variante Juarez Celman sobre la Circunvalación se llevó a casi toda "su familia", como la define él. "Eramos muy unidos. Ibamos a todas partes juntos", describió en su primera entrevista a semanas del horror.
Facundo, de 24 años, estaba de novio con Carla, de 31, y la familia de ella lo sentía como un hijo. Él es soldado voluntario del grupo de artillería Paracaidistas 4 y allí es "conductor motorista".
"Eramos muy unidos. Ibamos a todas partes juntos".
Cuando salían en familia, siempre manejaba él. Pero algún capricho del destino hizo que Carlos, su suegro, se pusiera al volante del Ford Fiesta en el que viajaban los cinco. Facundo, en esa ocasión, viajó sentado en el asiento del acompañante: uno de los motivos por los que él cree que está vivo.
"Me acuerdo de un camión, dos luces, mi novia gritó y no me acuerdo más nada", reconstruyó. Una Toyota Hilux que venía de la mano contraria los chocó de frente al intentar sobrepasar un camión. El auto de Facundo se partió en dos. Carlos, Carla y Pedro murieron en el acto.
"Me acuerdo del camión, dos luces, mi novia gritó y nada más".
Él salió despedido por el parabrisas. "Prácticamente salí solo, me sentaron a 10 metros del accidente y después me llevaron al hospital", contó sobre el milagro en medio del desastre.
Minutos más tarde llegó al Hospital Militar con algunos golpes leves y astillas en la cara. En menos de dos días le dieron el alta, decisión que los médicos retrasaron sólo para evitar que asista al velorio de la novia. Su suegra, Rosalía, la otra sobreviviente, sigue grave y está sedada. Aún no sabe lo que ocurrió con su única hija y su marido. Y los médicos esperan su evolución para comunicárselo.
"Lo que hizo ese señor fue una locura. Por llegar 10 minutos antes, destruyó a una familia. Por andar rápido pasó ésto", expresó con dolor Facundo al hablar del motivo del accidente. El conductor de la camioneta, de 76 años, también perdió la vida. Murió horas más tarde en el Instituto Cardiológico y el joven también lamenta que los familiares del hombre no se hayan acercado a verlo o hablar con él.
"La gente mayor no tiene los mismos reflejos que los jóvenes", manifestó Facundo, quien piensa que el hombre podría haber volanteado para el otro lado, con más reflejos. Y fue más allá con su reflexión: "Si yo fuera intendente, no le daría el carné a alguien de más de 70".
"Si yo fuera intendente, no le daría el carné a alguien de más de 70".
A Facundo se lo ve intacto por fuera, triste, pero muy fuerte. Hoy lleva adelante la dolorosa tarea de cerrar la peluquería de su novia, adonde aún le dejan flores quienes tanto la quisieron. Y a pesar de la irremediable tragedia, asegura que su formación lo está ayudando a salir adelante. "El ejército me cambió la cabeza. Tenés la muerte cerca. Porque formamos el espíritu, por eso creo que salí algo entero de esto".