Todo Quilpo, menos las escuelas, pertenece a la empresa Cefas. Ante la caída de la demanda de cal hidratada, se anunció el cierre de la cantera y los habitantes del pueblo quedaron a la deriva.
Si bien la compañía aclaró que busca alternativas para que no se pierda trabajo -anunció que preservará "parte de los puestos" y se dedicaría a la molienda de piedra-, 70 personas están con más de un pie en la calle.
"Según los dueños esto no daba ganancia y cerraron. Nos enteramos el sábado por la noche vía WhatsApp", le dijo René Heredia, uno de los afectados, al equipo de Telenoche que viajó a la localidad ubicada a 160 kilómetros al noroeste de la capital provincial. "Aparentemente nos quieren sacar, quieren que desaparezca Quilpo", denunció la esposa de otro ex empleado.
+ VIDEO: la palabra de los afectados por el cierre de la cantera:
"Un golpe fortísimo"
Claudio Farías, intendente de Cruz del Eje, reclamó por la situación en la localidad vecina. "Hoy 19 familias se quedan sin su pan de cada día, es muy difícil. Queremos ayudarlos. Vamos a ver si a los casos más difíciles los podemos ubicar en algún lugar para que trabajen", resaltó en Telenoche.
"También vemos que hay una ausencia del Estado. Necesitamos oportunidades, no que nos den, porque son gente de trabajo. Pero uno avanza y de repente esto te golpea", reprochó el intendente.