Si bien la información no es oficial, los medios de comunicación de Holanda afirman que Máxima Zorreguieta viajó de inmediato a la Argentina, tras conocer la triste noticia. Según informó el diario AP de Holanda, la reina vuela con su esposo, el Rey Guillermo, y sus tres hijas, tras conocer la muerte de su hermana menor, Inés Zorreguieta. Lo que sí se confirmó es que toda su agenda de actividades prevista entre el 11 y el 15 de junio fue cancelada.
Por su parte, la Casa Real que comunicó hoy la muerte de Inés Zorreguieta, aseguró que la reina Máxima está "muy conmocionada y triste" por la pérdida de su hermana, de 33 años, quien sufría un grave cuadro de depresión y trastornos alimenticios.
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Las reacciones en los Países Bajos no demoraron en llegar, sobre todo por el gran cariño que los ciudadanos tienen hacia Máxima. El primer ministro holandés, Mark Rutte, dijo que la "muerte repentina de la hermana de la reina es un gran shock" y agregó que es "una noticia muy triste y desgarradora" para la monarca y toda su familia.
Máxima tenía una gran predilección por Inés, 13 años menor que ella. Era la madrina de la princesa Ariadne, una de sus tres hijas. Incluso trascendió que la reina estaba muy al tanto de la complicada situación por la que estaba atravesando su hermana y que había intentado convencerla varias veces que se fuese a vivir a Holanda.
La fiscalía que investiga el hecho informó que "no se observan indicios de criminalidad", lo que abonaría la hipótesis de que se habría tratado de un suicidio. La hermana de Máxima fue encontrada muerta en su departamento de Caballito, por su mamá y una amiga que tenía las llaves de su casa. Como hacía un día que no se podían comunicar con ella, decidieron ir a ver qué pasaba y se encontraron con este trágico desenlace. Al parecer, se habría ahorcado.
La familia real viene de una seguidilla de tragedias y hechos dolorosos. En el 2013, el Rey Guillermo perdió a uno de sus hermanos, Friso, luego que fuera sepultado por una avalancha mientras esquiaba en Austria. En agosto del año pasado, la reina Máxima también viajó a la Argentina con su familia, para asistir al sepelio de su padre, Jorge Zorreguieta, quien no asistió a la boda real, cuestionado por sus vínculos con la última dictadura argentina.