El humorista Camilo Nicolás y su familia atravesaron uno de los momentos más duros de su vida debido a la inseguridad. El lunes por la tarde, a las 19, dos delincuentes ingresaron a su casa y un tercero se quedó afuera haciendo de campana. Ocurrió en barrio Argüello, zona norte de la Ciudad de Córdoba.
Adentro estaban su esposa Gislena y su hija, una beba de un año. Él no se encontraba porque estaba trabajando en una radio.
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Por fortuna los delincuentes no las lastimaron, pero les robaron dinero y joyas. Sin embargo, hay gran preocupación porque al parecer los ladrones tenían llave y eso los hace sospechar “del entorno cercano”.
Estremecedor
Camilo habló con Noticiero Doce y aseguró que los delincuentes conocían bien la casa y hasta las posiciones de las cámaras de seguridad. No forzaron la puerta y eso les hace pensar que quizás tenían una copia de la llave.
Los ladrones sorprendieron a su esposa en la cocina mientras alimentaba a su hija. De inmediato la encerraron en la habitación y le exigían que entregue dinero.
Tras darles todo lo que tenía, Gislena comenzó a desesperarse y pedir que la dejen estar con su beba, que había quedado llorando en la cocina. Uno de los atacantes accedió y la banda decidió encerrar a ambas en el dormitorio para poder seguir revolviendo la casa en busca de objetos de valor.
En ese momento, que quedó registrado en video por las cámaras de seguridad, la mujer aprovechó que la habitación tiene conexión con el patio y con gran valentía tomó una decisión que fue clave para salvar sus vidas: salió, cerró las puertas, activó la alarma antipánico y comenzó a gritar a los vecinos para pedir ayuda.
“Uno de los vecinos me llamó y me dijo ‘Están robando en tu casa y está tu esposa adentro a los gritos’”, relató sobre ese tremendo momento. El humorista se retiró de inmediato de la radio y comenzó a manejar a toda velocidad hacia su vivienda.
La mujer salió al patio con la bebé y pidió auxilio. / Foto: cámara de seguridad
Gracias al rápido accionar de Gislena, los delincuentes tuvieron que huir a los pocos minutos y no las lastimaron. Escaparon con algo de dinero y todos los objetos de valor que tenían a mano.
Un momento de terror
“Lo peor es que el entorno es sospechoso. Porque hay alguien que sabe mis movimientos. Entraron sabiendo que solo iban a estar mi esposa y mi bebé”, lamentó Camilo aún conmocionado.
“Si quieren te violan, te pegan, te matan. La sensación es horrible”
Y agregó: “La sensación que me queda es horrible. Tuve mucho miedo por mi familia. Esto es lo más cercano a la muerte. Si quieren te violan, te pegan, si quieren te matan. Si te quieren hacer pasar el peor momento de tu vida con tu hija, lo hacen”.
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Además Camilo insistió en que los ladrones conocían cada detalle de la casa, ya que incluso se tapaban el rostro cuando pasaban cerca de una cámara de vigilancia. “Es muy feo es perder la tranquilidad”, cerró.