Mientras le practicaban una cesárea a una paciente, un joven entró a la sala de operaciones. Intentó esconderse, porque lo venía siguiendo un grupo armado que ya lo había golpeado durante una pelea en un local bailable.
Dentro del hospital hubo corridas, gritos y cuatro disparos, informó el sitio Pergamino Verdad. De casualidad no le dieron a la mujer del parto o al personal. Se vivieron momentos de pánico y desesperación.
En las cámaras de seguridad, quedó registrado el momento en el que intervino la policía. Los uniformados detuvieron a dos de los implicados en el violento hecho. VIDEO
Pergamino