Un fin de semana violento se vivió en la cárcel de Cruz del Eje, al norte de Córdoba. Eran cerca de las 23 del viernes, cuando tres presos entraron a la celda de otro y lo atacaron brutalmente hasta dejarlo sin vida.
Lucas Ariel Otín, de 31 años, oriundo de Villa Martía, había sido condenado en 2011 a ocho años de prisión por delitos de hurto simple, robo agravado y amenazas.
Pero en el penal encontró la muerte, luego de ser asesinado de siete puntazos con púas carcelarias en distintas partes del cuerpo. Después de este crimen a sangre fría, fue trasladado de urgencia al hospital Aurelio Crespo. Sin embargo, era demasiado tarde: los médicos no pudieron salvarlo.
Aún tratan de determinar cómo ocurrieron los hechos y quién son los responsable. Hasta el momento tres son los sospechosos. La Fiscalía de Turno y el Tribunal de Conducta Policial y Penitenciario están a cargo de la investigación.