Dos mujeres, unidas por un parentesco de madre e hijastra, podrán casarse tras conseguir la autorización del juez de Familia de Rosario, Ricardo Dutto. Lo más curioso es que se trata de una mujer de 33 años que se casará con su hijastra de la misma edad.
"La Constitución Nacional garantiza a todo ciudadano el derecho de procurar su propia felicidad, y si una ley impone el parentesco por afinidad como impedimento para contraer matrimonio se menoscaba a estas dos mujeres", argumentó el juez de Familia en un fallo que se conoció hoy.
La historia entre ambas comenzó en septiembre de 2009, cuando una de ellas se casó con un hombre viudo, padre de la otra, que al poco tiempo falleció. A partir de allí comenzó otra relación entre ellas.
"La hija y la esposa jamás mantuvieron un vínculo de madrastra e hijastra pero a poco del fallecimiento del hombre se acercaron, se conocieron y nació un gran afecto. Luego, se pusieron de novias y desearon casarse. De hecho, actualmente conviven", expresa el juez en el fallo en el que ordena al Registro Civil a casarlas.
Las mujeres se enteraron que no podían casarse la primera semana de este mes en el registro civil de Rosario, cuando concurrieron a solicitar turno para casarse, y se lo negaron, por lo que decidieron presentar el caso en la Justicia y así lograron la autorización para contraer matrimonio.