Pasan las horas y cada vez hay más casos positivos de coronavirus en el país y en nuestra provincia. Día tras día aumentan las muertes por culpa de este virus que llegó para cambiar las formas de relacionarnos en este mundo. En este contexto incierto, de aislamiento por las dudas, por tu vida y por la de tus seres queridos, hay trabajadores que arriesgan la suya para proteger la salud de todos.
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Federico Harkes es médico y encabeza el equipo de trabajo que compone junto a la enfermera Noemí Fernández y Oscar Didoni, el chofer de la ambulancia de la Municipalidad de Montecristo. Representan la tarea de tantos otros que, en iguales condiciones, transitan a diario esa ruta de la esperanza a riesgo de todo.
“Este momento se atraviesa con miedos, tratando de poner mucha onda porque sabemos el trabajo y la responsabilidad que tenemos”, cuenta Federico a ElDoce.tv, detrás de un barbijo y escondido dentro de un traje supersónico. Apenas se notan sus ojos y su sensibilidad.
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Están acostumbrados a la vorágine, tienen ese don de llegar justo a tiempo y de saber qué hacer cuando todos desesperan. Pero nunca imaginaron que, esta vez, el trabajo de salvar vidas pudiera poner en riesgo a los suyos: “Ese es nuestro miedo, el de contagiar a nuestras familias”.
Noemí y Oscar tienen bastante más años que Federico en esta tarea contrarreloj. Sin embargo, son inexpertos, como todos, ante esta inusitada contingencia. “Nadie de nuestra generación transitó por una pandemia y solo sabemos que tenemos que cuidarnos con las correspondientes medidas de prevención. Solo así podremos superar este momento”, coinciden.
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Este trío reforzó lazos este último tiempo, tal vez más que nunca antes. “Somos un equipo muy unido. Pensamos muchas veces en abandonar todo esto, pero la vocación y la responsabilidad es lo que prima”, dice Federico, y agrega: “Sentir el aplauso de la gente nos reconforta. Pero no somos héroes, somos médicos y cumplimos nuestra tarea”.
+ La entrevista con Federico, Noemí y Oscar: