Lo establece la Ordenanza 12859. Las penas van dirigidas a "aquellos particulares que trasladen a pasajeros a título oneroso, promocional, por canje o similares".
Un grupo de concejales votó por la nulidad de la nueva ordenanza de taxis y remis, ya que consideran que el texto publicado en el libro de sesiones no se corresponde con el que se votó.