Unas 25.000 direcciones de mail y contraseñas fueron filtradas a la web y desataron todo tipo de sospechas-19. También fueron atacadas otras organizaciones que luchan contra el COVID-19.
A través de un mail reservado, denunciaron la irrupción del COVID-19 a la Organización Mundial de la Salud. En ese momento advirtieron por siete casos.
La Organización Mundial de la Salud decretó el alerta máxima. Mientras tanto, los países toman medidas para prevenir una epidemia. Una aplicación muestra los casos en tiempo real.