María Eugenia Villarreal (48) fue asesinada de un disparo por su padre Teodoro Yanacio Villarreal (75), quien luego se quitó la vida con el mismo revólver calibre 22. El crimen sucedió en la ciudad de La Carlota el pasado 21 de febrero a la noche.
La víctima se encontraba acomodando su gimnasio al finalizar una clase de zumba cuando el hombre la atacó. Según manifestó una testigo, vio ingresar al padre cuando ella se retiraba del local y segundos más tarde escuchó las detonaciones desde la calle.
El fiscal de Río Cuarto Daniel Miralles, que investiga el homicidio seguido de suicidio, sostuvo ante los medios locales que la “mecánica es presumible y es aventurado hablar en los inicios de la investigación sobre cómo se ha desarrollado, pero todo indica que ingresó, agredió mediante el empleo de arma de fuego a la mujer y posteriormente se ha quitado la vida”.
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Los cuerpos de ambos fueron trasladados a la morgue judicial de Río Cuarto. Los primeros datos indican que ella recibió un balazo en el parietal derecho con salida en el occipital izquierdo, mientras que él tenía una herida de arma en el occipital derecho.
Mientras aguardan los resultados, el fiscal ordenó allanamientos en la casa del padre de Eugenia “a los fines de encontrar el celular y otros elementos que puedan servir a la causa”.
Denuncias previas
El funcionario judicial reveló en FM Más de La Carlota que el hombre tenía antecedentes por violencia de género. Por un lado, María Eugenia lo denunció por una “circunstancia bastante similar a esta en el mismo gimnasio”.
El hecho ocurrió el 7 de julio de 2020, en plena pandemia, y desde ese momento la fiscalía interviniente dispuso una perimetral de acercamiento a su hija María Eugenia por 180 días confirmada por el juez de violencia.
También informó que la madre de la joven asesinada y expareja de Teodoro Yanacio Villarreal lo denunció en 2022. Esta mujer, después de enterarse del crimen de su hija, se descompensó y debió ser internada.
Una relación complicada
Miralles planteó que “no existe momentáneamente la ocurrencia de una tercera persona” y para conocer cómo era la relación padre e hija relevará el círculo cercano. Y consideró que “cualquier conclusión a la que se llegue podría ser apresurada”.
De acuerdo a la información recopilada por medios locales, María Eugenia y su padre Teodoro Yanacio estaban distanciados desde hacía tiempo y la “relación era mala hacía muchos años”.
Algunos versiones indican que “había mucho dinero y propiedades de por medio” y los problemas se habrían profundizado en los últimos meses a raíz de la división de bienes con su madre durante el divorcio. El distanciamiento entre padre e hija se habría originado luego de que Villarruel echara de la casa a la madre de Eugenia: “Fue una desalojo violento”.
También revelaron que el papá se dedicaba a la compra y venta de autos usados y sería prestamista, actividad a la que María Eugenia también habría incursionado.