En el marco de una operación conjunta sin precedentes, dos fiscalías de Buenos Aires concretaron la detención del mayor distribuidor de pedofilia del país en la actualidad.
Se trata de un hombre de 38 años, solo identificado como “P.”, quien descargaba y enviaba alrededor de 80 mil archivos de abuso sexual infantil por día. Lo capturaron en la casa que compartía con sus padres en Florida Oeste, en el partido bonaerense de Vicente López.
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La causa comenzó por un dato que llegó a la fiscalía y permitió empezar a trackear la actividad del chacal. La inmensa cantidad de archivos que distribuía por día impactó a los investigadores, quienes además advirtieron sobre la calidad de resolución de los videos y la amplia variedad. Incluso tenía carpetas individualizadas por poses, relaciones familiares, hasta de bebés abusados.
“El volumen de archivos y el nivel de violencia registrado en ellos convierte al imputado en el principal distribuidor de este tipo de contenido en la Argentina, al menos en el último tiempo”, señalaron fuentes judiciales.

En la vivienda los agentes encontraron una verdadera “sala de comando”. Había una computadora de alto rendimiento, con características propias de un gamer o incluso de un minero de criptomonedas, tres discos rígidos externos, pendrives, memorias y un celular, todo con capacidad para almacenar grandes volúmenes.
El impresionante material fue secuestrado para continuar con la investigación. Deberán determinar ahora si el hombre producía el material, además de distribuirlo. También sospechan de que esté involucrado directamente a casos de abuso a menores.
Los investigadores no solo se toparon con la escalofriante cifra de archivos de pedofilia sino que además hallaron tutoriales para captar menores de edad.

Fuentes de la causa informaron que en la casa de Vicente López también incautaron cartas manuscritas con caligrafía infantil dirigidas a él. Este dato alimenta aún más la teoría de que puede estar vinculado a la producción del material.
El detenido fue puesto a disposición de la Justicia y enfrenta cargos por tenencia, distribución y comercialización de material de abuso sexual infantil, delitos que prevén penas de cumplimiento efectivo.