El brutal choque ocurrido el 31 de octubre en José C. Paz ya dejó un saldo devastador: un matrimonio muerto, tres hijos huérfanos y un conductor de 23 años detenido. Ahora, un informe pericial al que accedió Clarín aporta precisiones claves sobre cómo se produjo la tragedia.
Renzo Benítez, de 37 años, manejaba el Renault 12 en el que viajaba junto a su esposa, Eliana Ramírez (31), en el asiento del acompañante, y sus tres hijos —de 8, 11 y 13 años— en la parte trasera. Al intentar cruzar la Ruta 197 a la altura de Mendoza, fueron embestidos de costado por una Volkswagen Amarok conducida por Michael Carballo.
Las cámaras de seguridad registraron parte de la secuencia: a las 23.39, el Renault ya había atravesado una mano de la ruta cuando la camioneta apareció a gran velocidad y lo impactó de lleno del lado del acompañante. El golpe fue tan violento que el auto familiar fue arrastrado varios metros y terminó derribando un semáforo. Renzo salió despedido del vehículo. Tanto él como Eliana murieron en el acto. Su hija mayor resultó gravemente herida.
El peritaje reveló que la Amarok circulaba, al momento del impacto, a una velocidad estimada de entre 73 y 100 km/h, con una media más probable de 88 km/h. La cifra es más del doble de la velocidad permitida en ese tramo, donde la máxima es de 40 km/h.
En contraste, el Renault 12 avanzaba a no más de 20 km/h, con una media de 15 km/h mientras cruzaba la intersección.
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Según el informe, cuando el auto comenzó el cruce, la Amarok se encontraba a unos 88 metros de distancia.
La pericia también determinó que el Renault 12 cruzó con el semáforo en rojo, mientras que no fue posible verificar el estado de las luces correspondiente al carril de la Amarok por la posición de las cámaras.
Aun así, los especialistas sostienen que ambos vehículos contaban con margen para maniobrar y evitar la colisión, aunque ninguno lo hizo.
Avanza la causa y suman un agravante clave
Tras el choque, Carballo quedó detenido y fue imputado por “homicidio culposo agravado por la conducción de vehículos automotores y por pluralidad de víctimas”, además de lesiones culposas.
Aunque la alcoholemia dio negativa, aún se esperan las pruebas toxicológicas completas.
En las últimas horas, fuentes judiciales confirmaron que la fiscal Ana De Leo solicitó una nueva indagatoria para el miércoles 19, luego de sumar a la acusación un agravante por “exceso de velocidad y culpa temeraria”, a partir de los resultados del peritaje.