Desde que llegó al Bailando 2017, la Bomba Tucumana no se calló nunca y demostró que tiene un carácter muy fuerte: nadie la puede pisotear. Pero jamás hubiéramos imaginado que le haría un reproche a su hijo en vivo.
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Gladys dio a entender que está muy celosa de Rocío Robles, la novia de Tyago Griffo. Cuando Marcelo Tinelli le preguntó si era así, ella aprovechó a retar al cantante de Trulalá: “Estoy enojada porque fue la primera en subir al auto nuevo de mi hijo”.
La cantante de la música tropical también mostró su costado más sensible en la pista. Conmovió a todos con su desgarradora historia de su infancia. Con lágrimas en los ojos recordó cuando su papá le pegaba y agradeció la llegada de su madre, a quien considera un ángel.
Después de la supuesta renuncia y arrepentimiento de Chechu Bonelli, llegó su momento de baile e hizo elevar la temperatura en el estudio con una coreografía subida de tono. La modelo la rompió en el reggaetón romántico.
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