Simón Aguirre y Valentina Márquez tocaron por primera vez este sábado en Studio Theater y la rompieron.
Por un lado, Simón, sobrino del fallecido Walter Romero (ex Banda XXI). Viene de Río Cuarto y son conocidos sus videos cantando cuando era un niño junto a su tío. Hace tres años empezó su carrera como profesional. Con un estilo personal que se acerca a lo urbano (parece más un cantante de trap que uno de cuarteto), viene cosechando éxitos que superan el millón de reproducciones, como “Vuelvo”, “Anda y dile”, “Nadie va” y “Tú no te imaginas”, o el reciente “Tacones rojos” que va camino a superarlos.
En el imperio del sur es el ídolo de los adolescentes: cada vez que hace un show llena y todos deliran con sus canciones. Y así pasó este sábado en Studio, donde abrió la pista pasada la 1,30 de la mañana y cerró cantando sus mejores hits.
Pero la protagonista de la noche en el local de Rosario de Santa Fe fue Valentina, la nueva revelación de la música de Córdoba. Tiene tan solo 21 años, pero su experiencia se nota en el escenario. Desde muy chica absorbió la historia del cuarteto con su papá, Lisandro Márquez, a quien en los últimos años acompañó como corista.
En febrero se lanzó como solista y la viene rompiendo en YouTube. El enganchado Quiereme, Deshazte de mi, Diles y Tu Si Sabes Quererme, tiene más de 800 mil reproducciones. No Hables, Asi No Te Amara Jamas, Si Esta Casa Hablara y Herida, ya cuenta más de un millón seiscientas y El fantasma, que grabó con El Loco Amato, ya llegó a un millón a solo un mes.
Pero no solo sus números impresionan. En su primera presentación oficial en la capital del cuarteto, Valentina salió al escenario y conquistó al público desde la primera sonrisa. Lo que siguió, una avalancha de simpatía acompañada de mucho talento y una voz impecable.
Ellos representan la nueva generación del cuarteto, y como sucede en la música urbana, se quieren, se apoyan y se alegran con los logros del otro.