Los expertos planeaban destruirlo con potentes explosivos colocados en la sección superior del edificio. Cuando dieron la orden de detonación, nunca se imaginaron que todo quedaría igual.
La compañía de demoliciones Adamo reconoció el fracaso y advirtió que la estructura quedó debilitada y podría venirse abajo en cualquier momento. De todos modos, deberán revisar muy bien la estructura antes de permitir que entren máquinas a demolerlo en forma mecánica. “Estuvo construido bastante bien”, ironizó uno de los ingenieros que planeó la implosión.
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En ese estadio, también jugó el equipo de fútbol americano Los Pistons. Tras una década de abandono, una multitud se reunió con máquinas de foto y de video para grabar el espectacular derrumbe. La falla los dejó con las ganas y la frustración de no haber sido testigos de su trágico final. VIDEO.