Los fuertes vientos provocan que las olas tomen altura y arrasen con todo cuando llegan a las orillas. En las vacaciones de verano, quienes disfrutan de la playa, siempre se divierten saltándolas a medida que se presenta.
Incluso los surfistas desean experimentar y desafiar a la ola más grande para lograr una mejor marca en su carrera. Pero, ¿alguna vez se habrán enfrentado a semejante ola? Casi cuatro años después, la Organización Meteorológica Mundial confirmó el registro de la más alta de la historia producida en el océano Atlántico Norte.
Ocurrió a las seis de la mañana del 4 de febrero de 2013, cuando una boya automática detectó una increíble marca: midió 19 metros, lo que equivale a un edificio de seis pisos. Se originó tras un viento de más de 80 kilómetros por hora. "Es la primera vez que se mide una ola de 19 metros. Se trata de un récord notable", señaló el subsecretario general de la OMM.
La ola que llevaba el título de ganadora se había producido el 8 de diciembre de 2007, también en el Atlántico Norte. Su altura fue de 18,272 metros, pero la marca duró hasta que registraron esta de 2013.