Las goleadas del Barcelona y los goles de Lionel Messi ya se transformaron en un clásico de cada fin de semana. El equipo catalán puede cambiar el color de camiseta, pero no modifica su costumbre de ganar y gustar a todos.
Vestidos de amarillo y sin que se note la ausencia de las estrellas secundarias como Neymar o Iniesta, hoy no fue la excepción en su visita al humilde Eibar. El crack argentino encabezó otra muestra de fútbol rompiendo un nuevo récord: por octava temporada supera los 20 goles en la liga.
El partido terminó 4 a 0 y Munir había abierto el marcador. Pero cuando Messi marcó el segundo, con una gran jugada, a los 40 del primer tiempo, todo terminó.
En el segundo tiempo, llegó un penal para Barcelona. Esta vez, no hubo toque al costado ni regalo de Messi para que otro convierta. El argentino la acomodó y la picó con clase para marcar el tercero.
Después, el uruguayo Luis Suárez cerró el marcador final convirtiendo el cuarto. Con esta victoria, Barcelona le sacó 11 puntos al Real Madrid y ocho al Atlético del Cholo Simeone, que debe jugar.
Todo indica que Messi, Mascherano y compañia conseguirán un nuevo título de la Liga de España. También están en la final de la Copa del Rey y avanzan en la Liga de Campeones de Europa. El objetivo es repetir la triple corona como en el 2015.