Una tarde normal de trabajo se transformó en un verdadero horror para dos empleadas de una cafetería de avenida Rafael Núñez al 4.600 de Córdoba. Apenas comenzaba el turno de la tarde, las dos jóvenes estaban en la cocina preparando los productos cuando un delincuente con un arma blanca ingresó, las golpeó y ató para robar.
Toda la escena quedó filmada por las cámaras. “Cuando no hay nadie cerramos la puerta porque al abrirse hace un ruido. Escuchamos el ruido y yo salí a atender”, comenzó el relato Jazmín Heredia, una de las víctimas, en diálogo con ElDoce.tv y siguió: “Veo un hombre que entra, parecía un cliente normal, pero se estaba tapando la panza y me pidió ir al baño”.
+ VIDEO: el momento del violento robo en una cafetería de zona norte:
Según Heredia, el presunto cliente estaba nervioso y como lo vio tapar algo con sus manos sospechó que podía ser un robo. “Atiné a correr y empezó a seguirme hacia la cocina, yo entré al baño, me puse contra la puerta para que no ingresara y le mandé un mensaje al dueño”, expresó.
El ladrón, que llevaba un cuchillo tipo Tramontina, quedó en la zona de la cocina con la otra empleada a la que le exigía que le diera su celular. En un forcejeo, la tiró contra el horno y luego la llevó de los pelos hasta el baño. “Le apoyó el cuchillo en la cintura pero no la hirió”, comentó Heredia sobre ese momento.
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Al tratar de encerrar a las empleadas en el baño, el asaltante se cayó al piso pero logró su cometido. “Nos ató de pies y manos con un mismo cordón y nos dejó ahí encerradas”, aseguró la joven que contó que les pedía dinero.
“Le pedíamos que no nos robara a nosotras, que trabajábamos en dos lugares y nos respondió que él también estaba trabajando”, relató y agregó: “Después de eso le dijimos que había en la caja pero no se robó nada, salió del baño, se tomó un trago de jugo de naranja y agarró unas aguas saborizadas”.
Mientras estaba sacando las bebidas, se activó la alarma de la cafetería y huyó. El jefe de las víctimas había visto el mensaje de la trabajadora, revisó las cámaras y vio el violento robo que estaban sufriendo. Alertó a la Policía e hizo sonar la alarma para espantarlo.
“La Policía llegó rápido, lo siguieron por los domos y lo pudieron detener”, afirmó Heredia quien después tuvo que ir a declarar con su compañera. Según les dijeron desde la fuerza, el delincuente tenía antecedentes penales.