Con un auto recién comprado, regresó a la concesionaria reclamando problemas mecánicos. Como no obtuvo respuestas se subió al vehículo y lo estrelló contra el salón.
El incidente se produjo el lunes a la tarde en una agencia de Sandy, en el estado de Utah. Michael Murray (35) exigía que le devolvieran el dinero y pretendía dejar el coche en el lugar pero el gerente de la firma le aclaró que eso no era posible.
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Ante esa contestación, Murray le dijo al responsable de la concesionaria que iba a pasar su vehículo por las puertas. Y cumplió con la amenaza. El hombre salió a la calle, subió al auto y arremetió contra el ventanal, describió el sitio local KSL.
Siete empleados declararon que tuvieron que saltar para evitar que el vehículo los impactara. Al lugar llegó personal policial para arrestar al automovilista que declaró que le concesionario le “vendió un limón y no le devolvieron el dinero”.
Trasladado a una dependencia del condado de Salt Lake, Murray es investigado por conducta criminal. Los dueños de la agencia estimaron que los daños rondan los 10 mil dólares.