Un nuevo escándalo sacude la realidad política de Venezuela. El opositor Leopoldo López, líder del partido de Voluntad Popular, fue condenado a 13 años, nueve meses y siete días de cárcel por la violencia desatada en las protestas que dejaron 43 muertos en 2014.
La jueza Susana Barreiros fue la encargada de anunciar la condena. Si no se da curso a la apelación que se espera de sus abogados, López cumplirá la pena en la prisión de Ramo Verde.
El dirigente estaba acusado de instigación pública, asociación para delinquir, daños a la propiedad e incendio, todos ocurridos durante la grave crisis social desatada el 12 de febrero de 2014. Además, según confirma El País, también sentenciaron a los estudiantes Christian Holdack a 10 años de cárcel y Ángel González y Demian Martin a cuatro años y seis meses.
Durante el jueves, en las calles reinó la tensión a la espera de las condenas. Cientos de personas se manifestaron y organismos internacionales reiteraron que se trata de un preso político.