En medio de la búsqueda por más sobrevivientes entre las ruinas del hotel Rigopiano, sepultado por un alud en el centro de Italia, el equipo de rescate se encontró con una gran sorpresa en la sala de calderas.
Hallaron tres hermosos cachorritos de mastín. Los socorristas tuvieron que derribar un muro para salvarlos. Afortunadamente se encontraban en buen estado, aunque los veterinarios decidieron controlarlos.
Los perros pertenecen a gestor del hotel, que sobrevivieron de milagro a esta catástrofe. Esto generó más esperanzas y creen que pueden encontrar a más personas con vida tras el desastre, cinco días después del suceso.
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En el lugar donde aparecieron las tres crías de mastín, fue donde salvaron a once personas. Por el momento solo seis personas murieron y veintitrés continúan desaparecidas.