La fiscal Patricia García Ramírez ordenó este jueves un allanamiento en la sede de la mutual del Surrbac (el gremio de recolectores de Córdoba), además de su intervención por 90 días designando como coadministradores a dos contadores seleccionados por ella.
La medida se tomó en el marco de una causa iniciada por una denuncia en 2015, en la que están imputados por "usura" y "administración fraudulenta" el número uno y número dos del sindicato (y también de la mutual), Mauricio Saillén y Pascual Catrambone, como así también el tesorero.
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Los líderes de los recolectores están acusados de, a través de la mututal, prestar plata a sus afiliados con intereses mayores a los permitidos por los organismos reguladores. Un ejemplo: a un empleado le prestaron 500 pesos y lo devolvió en dos cuotas de 300.
Además, no está claro el destino de los fondos conseguidos a través de esa operatoria financiera, la cual no estaba autorizada por el Banco Central. Lo curioso es que siguen ofreciendo créditos a través de la web.
El papel de la Amsurrbac
Era hasta hoy un órgano clave de la estructura del sindicato, porque era la institución a través de la cual se adquirían bienes y organizaban eventos, como la fiesta millonaria del 1º de mayo. Los fondos de la mutual eran usados a discreción de los sindicalistas.
En Telenoche, el abogado del denunciante contó cómo operaban: