El Gobierno nacional decidió el ingreso de ciudadanos chilenos a través del Paso Samoré (Neuquén) y otros dos pasos fronterizos ubicados en Chubut (Huemules) y Santa Cruz (Austral) en un "acuerdo de reciprocidad" con el país vecino, por "cuestiones humanitarias".
La medida fue publicada en el boletín oficial y avalada por la Dirección Nacional de Migraciones.
Por supuesto generó una gran polémica, tras la escalada de casos de coronavirus que registra Chile y las provincias por donde se permitirá el ingreso de ciudadanos chilenos.
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En tanto, la directora nacional de Migraciones, Florencia Carignano, explicó en diálogo con el canal TN que este decreto solo modificó algunas palabras de la decisión anterior y que las fronteras permanecen cerradas. "Es una disposición que ya venía estando vigente, que garantiza el tránsito país-país. Lo único que se hizo fue modificar la palabra 'residentes' por 'ciudadanos' y en vez de decir 'localidades' se aclaró que son los 'pasos'".
Y justificó la excepción diciendo que: "Hay pueblos, comunidades muy pequeñas, a los que si no garantizamos la posibilidad de poder acceder a su ciudad de un lado y del otro quedan aisladas".
Por último, aclaró que el mes pasado ingresaron por esos pasos solo dos personas y que el anterior solamente fueron tres.