El trístemente famoso monasterio de la localidad de General Rodríguez fue visitado, esta mañana, por el juez federal Daniel Rafecas. Junto a miembros de Policía Federal, realizó una inspección ocular en el lugar donde, la madrugada del 14 de junio, José López, fue apresado cuando intentaba esconder casi nueve millones de dólares.
Al finalizar el procedimiento, el magistrado aseguró que se secuestraron documentos que prueban una relación con el ex secretario de Obras Públicas de por lo menos 10 años. "Estamos plenamente satisfechos", señaló Rafecas, antes de confirmar que citó para el viernes a dos de las cuatro hermanas que estaban esa noche en el lugar.
"La Madre Alba, de 95 años no está en condiciones de declarar", aclaró el juez. Además de ella, la madrugada que llegó López estaban las hermanas Inés (Celia Inés Aparicio), Marcela y María.
La semana pasada, la Oficina Anticorrupción solicitó este procedimiento "con facultades para allanar y, eventualmente, secuestrar elementos de interés para la Justicia".
La situación de las religiosas se complicó tras la difusión del video donde se ve a la primera de ellas ayudar a López a ingresar los bolsos con dinero dentro de la casa principal del convento.
Además, el juez convocó para mañana jueves al testigo Jesús Ojeda, el comerciante que llamó a la Policía alertando que un hombre (López) arrojaba bolsos en el convento en plena madrugada.
Mientras tanto, el ex funcionario kirchnerista sumó una nueva prisión preventiva. El juez de garantías de Moreno, Gabriel Castro, tomó la decisión por la portación ilegal del arma de guerra que también llevó al monasterio.