Después de que el Gobierno Nacional desplazara a Juan José Gómez Centurión, jefe de Aduana, por sospechas de corrupción y subfacturación, un inesperado apoyo provoca internas en el oficialismo.
La diputada Elisa Carrió lo recibió en su casa para brindarle su apoyo en medio de la fuerte polémica que derivó en su corrimiento. Lo definió como “un hombre honesto” y expresó que tiene “el deber de no dejarlo solo”.
Carrió calificó la reunión como “satisfactoria” y prometió brindar un informe sobre la situación de la Aduana, que también será remitido a la Justicia.
"Así como fue correcta la separación preventiva del cargo, es correcto defender la verdad y el honor del funcionario, yo que estoy acostumbrada a quedarme sola junto con los míos durante muchos años frente a una denuncia, tengo el deber de no dejar sólo a Gómez Centurión", resaltó la diputada nacional.