Desde que salieron a la luz, las fotos de Victoria Vannucci y Matías Garfunkel con sus trofeos de caza indignaron a todo el país. Varios famosos expresaron su bronca y, este sábado, organizaciones proteccionistas escracharon el local de lencería de la modelo.
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Las imágenes de los leones, hipopótamos y cocodrilos -entre otros animales- muertos, con los empresarios sonrientes tras haberlos cazado, no dejan de impresionar. Pero, aunque en ese momento nadie lo notó, la pareja ya había demostrado su fanatismo por las piezas de animales.
En 2013, Vannucci y Garfunkel abrieron las puertas de su mansión de Belgrano, Buenos Aires, a la revista Hola!. El living es escalofriante: ahí se se pueden observar los sillones de asta, hecho con cuernos de animales, y sillones de cuero vacuno.
Según la publicación, los muebles fueron traídos de París por pedido de Garfunkel, que se enamoró de ellos apenas los vio.