* Por Belén López Mensaque - Colaboradora
“Nos juntamos un día en el río y dijimos 'mirá qué hermoso este lugar, pero está muy sucio'. Eso fue un miércoles y ese mismo sábado ya estábamos limpiando”, contó Hernán Magnien, de 26 años, uno de los primeros voluntarios de “Río Sustentable”, un grupo de amigos que desde ese día se junta todos los sábados a limpiar el río y recuperar un espacio para el barrio. “Amistad y voluntad” son las bases de esta iniciativa que camina cada fin de semana para recomponer esa corriente de agua que viene desde el Lago San Roque, cruza diferentes localidades y barrios de Córdoba y desemboca en la Laguna Mar Chiquita.
“Empezamos como si fuera una ficha de dominó que fue cayendo. Un finde éramos 15. Al otro, 30. A los dos o tres findes ya teníamos Instagram y nombre. Un día fuimos 200”, explicó Magnien. En medio de la pandemia, cuando una de las pocas actividades permitidas eran las caminatas cerca del hogar, la propuesta de este grupo de amigos atrajo a muchos vecinos que se fueron sumando. Poco a poco, cada sábado se convirtió en un ritual para la gente de la zona. Todo ocurría entre los barrios Villa Warcalde y Los Carolinos, al noroeste de la ciudad, en un tramo de 2 mil metros del Suquía.
¿Cómo se hacen las limpiezas? Un par de guantes, una bolsa y a juntar la basura. Se dividen en grupos en diferentes sectores del río, para abarcar más espacio. Al principio juntaban todo en el mismo lugar, ahora separan por un lado los residuos que son reciclables, y por otro, lo desechable. Lavan y secan todo lo que se puede recuperar, y lo llevan a los centros verdes de la ciudad, donde se separa y clasifica para luego reciclarse.
Quienes realizan la recuperación del río remarcan que es un trabajo que solamente se puede hacer manualmente. Se termina de entender que la basura no se puede sacar de otra forma cuando se observan los residuos enredados en los árboles, en el lecho y en el suelo de las márgenes del río.
Además de botellas, colillas, y latas, el grupo ha encontrado una variedad enorme de cosas en el lugar. ¿Lo más loco? Una botella de vidrio cuya fecha de vencimiento era 1990. Llevaba más de 30 años ahí. También computadores, bidones con combustible, televisores viejos, valijas, cubiertas de autos, ropa y colchones, muchos colchones.
Cada sábado pueden llegar a juntar más de 100 bolsas de desechos, y al comienzo tenían que sacarlas a mano y repartirlas entre los cestos de la calle de los vecinos del barrio. Un día estaban limpiando una zona del río en donde hay un vado. Es un paso inutilizado, pero en ese momento el puente para ingresar al barrio “Los Carolinos” estaba cortado y los autos pasaban por ahí. Cruzó una persona que trabaja en Lusa, una de las empresas que hace la recolección de basura en la ciudad, vio lo que estaban haciendo y les consiguió un camión. “Fue una emoción muy grande porque nos iban a traer un camión después de tantos sábados remándola”, contó Miranda Vazquez Jones, otra de las pioneras del grupo, de 23 años.
A fines del año pasado y con ayuda de contenedores y Bobcats que les prestó la Municipalidad, lograron cerrar dos basurales de la zona. “Sacamos toda la basura, pusimos troncos para que nadie más pase y ahora hay un parquecito hermoso con árboles que plantamos nosotros”, señaló Magnien, orgulloso.
¿Qué pasa en las otras zonas del Suquía?
En Córdoba existieron y existen otros vecinos que también limpian el río en otros puntos de la ciudad. Hace 10 años que Gustavo Ninci mantiene el tramo que pasa cerca de su casa, en el barrio de Villa Belgrano, a veces con ayuda de otros, a veces solo. Son cerca de 200 metros que ahora la gente usa para caminar o hacer picnics. Otro grupo de voluntarios cuida el río en el Valle del Cerro, que cada fin de semana se llena de personas que aprovechan el lugar para pasar la tarde.
Si alguien recorre la ciudad, seguramente no se encuentre con una imagen sucia del Suquía. Y esto es porque las partes del río que están frente a grandes avenidas o a la costanera, suelen mantenerse limpias. Pero no ocurre lo mismo en los tramos que pasan por calles poco transitadas o muy metidos en los barrios.
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En diciembre del 2020, la Municipalidad de Córdoba presentó la “Unidad Ejecutora Costanera (UEC)”, un área de la Secretaría de Gobierno que se encarga de trabajos de limpieza de basurales, desmalezamiento, forestación y recuperación del mobiliario urbano en ese sector del río. Es decir, en las márgenes que bordean la Avenida Intendente Ramón Bautista Mestre, más conocida como “La Costanera”, desde el Puente 15 hasta el Bicentenario. Según informó el Ejecutivo de la ciudad, la creación de esta unidad “cristaliza un profundo trabajo que la Municipalidad de Córdoba viene realizando desde hace meses”.
Otra de las tareas de la UEC es realizar un relevamiento del estado de esa zona. Uno de los datos que aportaron es que solamente en ese tramo del Suquía hay 296 microbasurales. Además, señalaron que en septiembre del 2020 recolectaron más de 529 mil metros cúbicos de basura.
Convertirse en un área protegida, el máximo objetivo de Río Sustentable
Los amigos unidos por el río ya limpiaron una zona de 2 mil metros de costa que estaba completamente abandonada, reciclaron los residuos, cerraron dos basurales y ahora quieren ir más allá. “Tenemos un gran proyecto. Que todo el espacio que está alrededor de las márgenes del río se convierta en un área protegida”, explicó Vazquez Jones. Frente a la costa donde trabajan, se encuentra la Reserva Natural Urbana General San Martín y piensan que podrían unirse las dos zonas, contó Belén Zaradnik, otra de las voluntarias, de 23 años.
Mientras tanto, las caminatas de limpieza continúan. En el Instagram @rio.sustentable todas las semanas se publica la convocatoria para el que quiera sumarse. No hace falta inscribirse, solamente llevar guantes, y barbijo. A un año de haber comenzado, el ritual de los sábados no se detiene, ese de caminar, compartir con amigos y recuperar el río.
