En dos operativos conjuntos, la Policía detuvo a dos miembros de la misma familia por distintos delitos. Se llevaron a cabo en una vivienda de la calle San Juan, en Brinkman al noroeste de la provincia de Córdoba.
El padre de familia de 51 años de edad comercializaba drogas. Era conocido en la zona por ser un “delivery” de estupefacientes. Su hijo de 28 había sido denunciado por un caso de violencia de género y tenía una restricción o impedimento de contacto que violó.
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Por un lado actuó la Fuerza Policial Antinarcotráfico y por el otro personal de la Policía de la Provincia bajo las ordenes de la Fiscalía de Lucha contra el Narcotráfico de San Francisco y la Fiscalía de Morteros.
En la casa, el personal policial secuestraron tubos de plástico con cocaína y un ato VW Surán.