El joven de 28 años entró a toda velocidad con su moto a una estación de servicio, luego de que dos motochorros intentaran asaltarlo dos cuadras atrás. Al frenar, notó que los delincuentes lo habían seguido. Uno de ellos se bajó y le apuntó con un arma; no imaginó que terminaría con la cara destrozada.
Sin dudarlo un segundo, el hombre -que iba con su novia- le corrió la pistola con su mano izquierda y lo noqueó de un brutal derechazo. Quedó en el suelo boca abajo y le dio varios golpes más en el rostro y en la cabeza.
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En ese momento, el cómplice pasó en la moto y le disparó a la víctima del intento de robo, pero la bala solo le rozó la pierna. Tras la paliza, el ladrón de 26 años fue detenido por las personas que se encontraban en ese momento, le precintaron las manos y luego se lo llevó la policía.
Ocurrió en una estación de servicio de de la ciudad bonaerense de San Antonio de Padua, el sábado a las 20. Una cámara de seguridad registró el hecho. Atención: las imágenes pueden herir su sensibilidad.
"Ni se dio cuenta de que le habían disparado. Yo no sé si al delincuente se le trabó el arma o qué, porque en la escena encontramos una sola vaina, pero se ve que lo tiene a tiro todo el tiempo", señalaron fuentes policiales a Clarín. Aún buscan al motochorro que huyó.