Enzo Porta es el nombre que trágicamente confirmó lo que que imaginaban todos desde que el ex gobernador De la Sota inauguró el Nudo Vial Tropezón, antes de dejar el mando en la provincia.
El hombre de 77 años murió intentando cruzar esa peligrosa obra, que resultó una gran solución para los automovilistas, pero un peligro mayúsculo para quienes transitan caminando la zona.
Antes de la tragedia, los vecinos y padres de los colegios de la zona ya habían manifestado su preocupación por el riesgo que era cruzar las distintas vías en medio de vehículos que alcanzan los 100 kilómetros por hora. Esta nota de Telenoche, del martes 22 de diciembre, así lo refleja:
Tras la muerte de Don Porta, la indignación se incrementó entre los habitantes de la zona y, anoche, volvieron a manifestar su enojo y su pedido de pasarelas en una protesta:
Esta mañana, tres inspectores municipales se hicieron presentes en el lugar y, ni siquiera ellos, sabían como solucionar el problema.
Está claro que la obra se inauguró con el apuro de la campaña electoral. Pero está más claro que era preferible terminarla con pasos peatonales antes que lamentar una vida, que puede no ser la única.