La joven de 20 años se mostró conforme con la pena de 15 años. "Solo me queda rehacer mi vida e intentar olvidar lo que un día me pasó", afirmó a la salida de tribunales.
Los abusos habrían ocurrido desde que tenía 13 años hasta sus 16. El acusado la habría amenazado, quedó detenido y lo habría hecho también desde la cárcel.
La madre de la víctima aseguró que su expareja estaba en la misma vivienda cuando ocurrió el abuso, no hizo nada para detenerlo y se opuso al arresto del agresor. La nena logró saltar un portón y huir.