Lo que parecía ser un simple inconveniente técnico terminó en un verdadero escándalo en un edificio. Un ascensor se trabó en el piso 7 y todo se transformó en una telenovela en tiempo real dentro del grupo de WhatsApp de los vecinos.
Una vecina llamada Gladys fue la primera en avisar: “Se trabó el ascensor en el séptimo”. Minutos después, y tras varios intentos de abrirlo, se logró liberar la puerta. De allí salió un joven que nadie reconocía como habitante del edificio.
@chacalboggian Un ascensor destapa la cruda verdad de esta pareja en un grupo de vecinos
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El encargado explicó que el chico decía ser del 7A, pero eso encendió todas las alarmas: en ese departamento solo vivían Pedro y Emilia, y el hombre se encontraba de viaje. Emilia, en tanto, afirmó que el ascensor “le funcionó bien” cuando lo usó.
Entonces, surgió la duda: ¿quién era ese desconocido atrapado? Gladys, que no se quedó tranquila, propuso llamar a la Policía porque el hombre no era del edificio. Mientras tanto, comentó que el joven llevaba una mochila con pertenencias y envió al grupo una foto del contenido para ver si alguien lo reconocía.
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Y ahí explotó todo. Pedro apareció en el chat desde su viaje y escribió: “Hola Gladys, sí, son mis cosas”. Confirmó que no conocía al joven, pero sugirió que su esposa sí, con una frase que no dejó lugar a dudas: “Es el amante de Emilia, Gladys”. Luego de eso, le habló directamente a su esposa y cuestionó la actitud de darle su ropa para que se vaya a jugar al fútbol, lo que hizo que la chica saliera del grupo.
Gladys, que ya se había convertido en la estrella del grupo, quiso zanjar la discusión: “Lamento todo y no me quiero meter más, pero ¿qué hacemos con este tipo?”. “Que se lo lleven preso por invasión a la propiedad”, propuso Pedro pero la vecina no le dio banca: “Entonces a vos también porque hace semanas te vemos invadir la casa de la del 4B cuando Ernesto se va, y ahora te hacés el indignado”.
A todo esto, apareció Ernesto totalmente desconcertado: “¿De qué carajos estás hablando, Gladys?”. Lejos de querer seguir metida en la historia, la mujer dijo que se arreglaran entre ellos pero avisó: “El ascensor ya funciona”.