El pronóstico es claro: este martes cambiará rotundamente el tiempo y llegará un nuevo frente frío a Córdoba, que incluso puede traer nevadas en las sierras.
Ante la posibilidad de heladas, proteger el jardín y el patio es importante si se quiere evitar un daño estético y, también, económico.
El primer tip es básico: es fundamental cubrir todas las plantas sensibles, pero no hay que hacerlo con plástico como muchos creen. Debe ser una tela que permita “respirar” a las plantas y la ideal es la tela anti-helada, que se puede conseguir en viveros.
Al ser porosa, deja pasar la luz del sol, lo cual es clave para la salud de la planta durante el invierno. Pero también se puede reciclar algún tipo de tela que tengamos en casa, tipo lienzo o alguna otra, pero siempre de trama más bien abierta.
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Otro tip clave es que no es suficiente una sola capa. Se debe envolver la planta con 2 o 3 capas para asegurar la protección.
“Cubrí completamente la planta o el árbol, desde la base hasta la punta, asegurándote de que quede bien envuelta. En la base de las plantas, agregar una cobertura como corteza, hojas secas del jardín o pasto seco, que ayuda a conservar el calor del suelo y protege las raíces”, explicó a ElDoce.tv María Paz Cherini, bióloga especialista en diseño y ejecución de jardines, balcones y terrazas.

Cuándo regar y descubrir
Las plantas deben mantenerse cubiertas durante toda la época de heladas. Recién hacia finales de agosto o principios de septiembre, cuando ya no haya riesgo de heladas, se deben retirar las protecciones.
Mientras tanto, mantener la humedad del suelo es clave para reducir el impacto de las heladas.
Es recomendable regar a media mañana, cuando la temperatura ya subió un poco. Mantener el suelo húmedo ayuda a minimizar el daño por heladas, ya que:
- Las plantas hidratadas toleran mejor el frío.
- El suelo húmedo conserva más temperatura que el seco.
- Es crucial evitar mojar las hojas y ramas, ya que el agua en el follaje puede congelarse y causar daños mayores.
Otro tip: uno o dos días antes de que se prevea una helada, regar profundamente el suelo alrededor de las plantas.
“Si algunas plantas ya presentan su follaje afectado, no apurarse a retirarlo. Ese mismo follaje va a proteger la parte más basal. Un ejemplo de esto es la Salvia leucantha, que no se poda hasta que pase la época de heladas”, recomendó Cherini.
El retiro de las telas anti-heladas se hace previo a la primavera. Ahí se poda todo lo que se haya helado y secado para esperar los brotes nuevos.
“El invierno es lindo, los colores que adquiere el jardín y notar el paso de las estaciones lo hacen más atractivo, pero la idea es disfrutar y no ser esclavo de los cuidados y solamente proteger las plantas jóvenes y sensibles”, añadió la especialista, y subrayó que “el secreto es elegir bien las especies y ubicarlas también en el lugar adecuado”.
Las plantas a cuidar son principalmente principalmente los cítricos jóvenes, ya que es fundamental su cuidado los 3 primeros años.
Otro ejemplo es la querida Santa Rita (Bougainvillea glabra) que todo el mundo ama por su floración: “Se hiela, sí. Pero si la ubicamos protegida del sur, la orientamos hacia el norte, cubrimos y mantenemos húmeda beneficiamos su existencia. Se pueden arruinar algunas ramas, que luego podaremos y no pasa nada”.
Por último, Cherini dejó un consejo clave para pensar un jardín o patio: “Como bióloga no puedo dejar de recomendar incorporar especies nativas, ellas se adaptan a nuestro clima y requieren menos cuidados”.
