En 1981, once jóvenes, diez mujeres y un hombre, con un futuro por delante egresaron del Colegio Clotilde Guillen De Rezzano en Río Segundo. Algunos del bachillerato de manualidades, de administración y otros de corte confección. Tuvieron su cena de fin de curso, pero no pudieron hacer el tradicional viaje a Bariloche a pesar de que hicieron hasta lo imposible por juntar el dinero que necesitaban para pagarlo.
Hace siete años, parte del grupo volvió a reencontrarse, la mayoría mujeres. Cada una con la vida resuelta, con la familia que ellas construyeron, algunas casadas, otras viudas, separadas, atravesadas por la tristeza de haber perdido un ser querido, pero firmes para cumplir su sueño: viajar al sur de la Argentina después de 38 años. ¡Tarde pero seguro!
Fue así como comenzaron a organizar lo que se convertiría en una gran experiencia, llena de anécdotas, donde pudieron sellar tantos años de compañerismo, historias de vida y arriesgarse a esa gran travesía con el entusiasmo de un adolescente, pero ya con 56 años vividos.
El pasado viernes 8 de febrero, Liliana Andrada, Dolores Arevalo, Estela Bolufer, Edith Centenaro, Viviana López, Stella Maris Mateo, M. Gabriela Navarro y Viviana Núñez salieron con mucha ilusión desde la terminal de Córdoba hacia su destino. Llegaron a la ciudad, ubicada al sudoeste de la provincia de Río Negro, y no pararon hasta el último día.
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Se aventuraron en todos los rincones, desde el Cerro Otto, el catamarán hacia la Isla Victoria, el lago Llao Llao, Bosque de Arrayanes, y hasta tomaron agua del Arroyo López porque, como dice la leyenda, "quien bebe tres sorbos ¡regresa a Bariloche!" También se divirtieron de noche. “Fuimos a bailar folklore a un casino”, dijo entre risas Viviana a ElDoce.tv.
Pero eso no fue todo, porque siguiendo las tradiciones de los egresados, se hicieron la remera de la promo 81 y la bandera con todos los nombres para posar en cámara y tener de fondo postales increíbles. Entre anécdota y anécdota, en la valija tampoco faltó el botiquín con “alguna pastillas para la tensión, la tiroides”, bromeó.
"Convivir cinco días, encontrarse con momentos de la adolescencia, fue increíble. Lo más lindo fue que el cariño y el amor sigue intacto", expresó emocionada al recordar todo lo que vivieron, no solo estos días, sino también lo que pasó hace 38 años.