Era la madrugada del domingo 6 de septiembre cuando un violento episodio terminó con una mujer golpeada por tres hombres y dos familias vecinas enfrentadas en barrio San Jorge, ciudad de La Falda.
Según relató el hijo de la víctima a El Doce, el ataque ocurrió cuando un vecino los sorprendió en el ingreso a su casa para pedirles un cigarrillo. Ante la negativa de su mamá, quien le aseguró que no fumaba, y el pedido de respeto por parte de su pareja para que dejara de insultarla, el hombre atacó a patadas al dueño de la vivienda.
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En un intento por separarlos, la mujer también recibió varios golpes. "Como no podía sacarlo, mi mamá desesperada empezó a pedir ayuda, pero nadie llamó a Policía", lamentó su hijo Lucas. En un intento de ponerle fin al ataque, fue a la casa del padre del agresor -vive sobre la misma cuadra- pero terminó siendo amenazada por la hermana.
"En ese momento sale mi hermana a los gritos, quiso separar a mi padrastro y la hermana del vecino le pegó y agarró de los pelos. Mi mamá agarró un tronco y le pegó a la chica", continuó relatando Lucas. Pero la pelea siguió aún con más violencia: "El padre y hermano del padre llegaron un bate de baseball y le pegaron a mi padrastro y a mi mamá".
A los pocos minutos llegó un móvil policial, pero según explicó el joven a este medio, no hicieron nada. "Mi mamá quedó desmayada en el piso y no llamaron a la ambulancia porque dijeron que era una 'riña familiar'".
Luego de ser asistidos en el hospital, y siendo el mediodía del domingo, se presentaron en la comisaría para hacer la denuncia. Sin embargo, solo registraron la exposición y "no aclaran nada de lo ocurrido ni le dieron una copia de la denuncia".
Tras la viralización de la foto de su mamá con el rostro herido, una profesional encargada de asistir a víctimas de violencia de género en La Falda se puso en contacto. "Si yo no subía la foto a Instagram, queda en la nada. Porque no es la primera vez que esta gente patotea a alguien. Queremos que se haga justicia", sentenció Lucas.