Un estadounidense llamado Ryan Borgwardt de 45 años quiso abandonar a su mujer y a sus tres hijos y, para eso, orquestó una fuga que incluía hacerse pasar por muerto. Después de varios meses apareció y su esposa se vengó.
El plan se inició el 12 de agosto de 2024, luego de que se anunciara su desaparición cuando supuestamente se fue de pesca al profundo Lago Verde en pleno verano. Allí fingió haberse ahogado y sus familiares así lo creyeron cuando encontraron su navío volcado con objetos personales como su caña de pescar y su celular.
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Fue entonces que su esposa, Emily llevó adelante una campaña para recolectar fondos y así iniciar la búsqueda. Durante 54 días diferentes equipos de rescate lo buscaron por agua y por tierra en las cercanías del lago, pero no encontraron ni un sólo rastro.
Con el desarrollo de las investigaciones las autoridades fueron por una nueva hipótesis, más compleja que un simple ahogamiento. Así obtuvieron informes según los cuales, en los días previos, Borgwardt hizo transferencias hacia el extranjero. Además, peritos en informática detectaron que se había comunicado con una persona de Uzbekistán.
El 13 de agosto, el día siguiente de su desaparición en el lago, pusieron la lupa en el uso de un pasaporte emitido a nombre de Ryan Borgwardt, lo que se opuso por completo a la versión inicial de desaparición en el río. Así, el FBI empezó a sospechar que se trataba de una fuga del país.
Recién en noviembre de 2024 las autoridades tuvieron las primeras señales de él y se intentaron comunicar para convencerlo de que regrese. Cuando lo contactaron, él admitió que había fingido su muerte por cuestiones personales y no quiso ahondar en detalles.
El pasado 10 de diciembre regresó a Estados Unidos y se presentó ante las autoridades del pueblo donde vivía junto a su esposa y sus hijos, Green Lake. Allí podría recibir la sanción de 10.000 dólares y nueve meses de cárcel. Por su parte la esposa le pidió el divorcio, la custodia de sus hijos y le inició una demanda por el dinero gastado en la búsqueda.
Cómo fue el plan
Según el sheriff Podoll, Borgwardt dio vuelta a propósito su kayak, colocó sus pertenencias arriba y se fue en otro bote hacia la costa. Desde allí se fue en una bicicleta eléctrica hacia Madison, se tomó un autobús hacia Detroit y desde allí se fue en avión a Canadá. Desde allí habría salido hacia Europa.