El Papa Francisco interrumpió, anoche, su descanso en la residencia de la Nunciatura Apostólica de Quito y salió a la puerta. Allí, saludó y bendijo a los fieles que pedían un saludo.
"¡Francisco te amo!", "¡Viva el papa Francisco!", "¡No nos vamos a ir!", gritaban los fieles.
"Antes de que se vayan a sus casas a dormir y a dejar dormir a los vecinos llegó la hora de la bendición", dijo el Papa, provocando las risas de los presentes. Después, rezaron todos un Ave María y el Papa les dio su bendición.
El Papa no dudó en romper, una vez más, el protocolo, sin importar las 13 horas de viaje que tuvo que realizar para cruzar el océano.
"Nos vamos a ver mañana y pasado mañana también estaré en Quito, así que nos vamos a seguir viendo", les dijo el Papa. Francisco se mantuvo afuera durante, aproximadamente, 3 minutos y, como siempre, pidió que recen por él.
La secuencia fue filmada por muchos de los seguidores, quienes no demoraron en compartirlo por las redes sociales. Mirá una de las grabaciones: