Un ataque sangriento que dejó miles de muertos, familias destrozadas y centenares de rehenes. La invasión del grupo terrorista Hamas en las poblaciones fronterizas con Franja de Gaza provocó que israelíes se quedaran sin su hogar y fueran desplazados sin saber cuándo podrán rehacer sus vidas.
Los enviados de El Doce a Israel, Federico Tolchinsky y Mauro Terenzio, viajaron a Ein Bokek, ciudad ubicada a orillas del Mar Muerto, para conocer las historias de los desplazados. Hoteles de lujo se convirtieron en refugios mientras los kibutz siguen siendo escenarios de fuego cruzado de manera constante.
Naor Pakciarz junto a su esposa y cuatro hijos vivieron una verdadera pesadilla el sábado 7 de octubre en Be’eri. Después de permanecer más de 20 horas en un búnker escuchando bombas, gritos y disparos, el Ejército de Israel los puso a salvo y trasladó a Ein Bokek. Lo perdieron y en su rostro se reflejaba dolor y desesperación.
Según relató al periodista de El Doce, estaba tomando café junto a su esposa cuando escucharon gritos en hebreo y árabe y vieron a personas con pistolas en la cintura. Hasta que comenzaron a disparar y lanzar bombas.
+ VIDEO: La historia de un israelí desplazado tras los ataques de Hamas
En ese momento, Naor se escondió con su esposa, cuatro hijos y la novia de su hijo mayor en un búnker que tiene en su casa para protegerse de los misiles. Pese a que intentó proteger a su mascota, la perra nunca entró al “cuarto seguro”. Allí estuvieron escondidos durante más de 20 horas.
En plena madrugada del domingo, llegó el Ejército israelí y los puso a salvo. Mientras los sacaban del kibutz en un colectivo, “ellos”, así señala a los terroristas, “seguían disparando”.
+ MIRÁ MÁS: El Doce en el muro de Tel Aviv que homenajea a los secuestrados por Hamas
En los dos primeros días, no sabían quién se había ido, quien seguía vivo ni quién había llegado al hotel. “Cuando llegamos al hotel veíamos niños, pero no sabíamos si sus padres estaban vivos, veíamos padres y no sabíamos si sus hijos estaban vivos, si fueron asesinados o secuestrados”, reveló angustiado.
También contó que conoce a más de 100 personas que fueron asesinadas por Hamas, entre ellos, amigos de la familia y hasta un niño de 10 años amigo de su hijo. Y en medio de tanto drama, tres días después de perder conexión con el padre de su esposa se enteraron de que fue asesinado.
Naor Pakciarz no sabe adónde va a ir con su familia, no sabe si van a regresar. “No sé si estoy preparado para vivir el mismo tipo de vida cerca de Gaza. Después de lo que pasó, no sé si mis hijos van a estar preparados para dormir en su cama después de lo que pasó”, lamentó.