El discutido gobierno de Nicolás Maduro comienza a sentir la presión del referendo revocatorio. Ante la profunda crisis política, económica y social que golpea a los venezolanos, el Consejo Nacional Electoral dio el visto bueno a las firmas acumuladas por la oposición.
De acuerdo a la Constitución del país, para iniciar el proceso debe lograrse el requisito de un 1 por ciento de las firmas del padrón electoral en cada una de las 24 provincias. Ahora, se abrirá una nueva etapa de recolección de firmas, que deberán llegar al 20 por ciento del padrón para que inicie formalmente el referendo.
En total, son 7.500.000 votos los que deben juntarse para terminar anticipadamente con el mandato de Maduro, elegido en 2013. Los pronósticos no lo ayudan, ya que el 73,4 por ciento de los venezolanos rechaza su gestión, según informó El País.
Henrique Capriles, líder opositor y ex candidato presidencial, festejó a través de Twitter el objetivo. Sin embargo, reclamó que se fije la fecha para la próxima etapa del proceso, algo que no hizo Tibisay Lucena, funcionaria a cargo del Consejo.