El escándalo en la Legislatura y sus fantasmas lejos de cerrarse con la difusión de la lista de contratados se agiganta, ya que abre cada vez más interrogantes.
Repasemos algunos puntos:
Lista parcial y dudosa. Estuvieron dos meses y medio desde que estalló la ruta del dinero Kraisman para peinar la lista de contratados, con lo cual no queda otra que dudar y mucho. Un rápido chequeo permite ver cómo de aquellos 23 contratados de diciembre que están en el expediente de la fantasma Virginia Martínez hay al menos tres nombres que ya no están. O sea, la lista no es la lista. Pulida y toda aparecen nombres que sorprenden, como el de Cristina Vidal, pareja del que fuera el hombre fuerte de la Legislatura, Oscar González. Es parcial porque alude a 1055 contratos pero le faltan los 287 monotributistas.
Una mega mega creadora de “empleo”. A esos 1055 contratados (varios de los cuales hace rato no pisan la ciudad de Córdoba) y 287 monotributistas que siguen oculto, hay que sumarle los 389 empleados de planta permanente más los 70 legisladores y una decena de funcionarios legislativos. Unas 2.200 personas cobran el sueldo mensualmente del Poder Legislativo provincial. Hay muy pocas empresas en el país que tengan semejante nómina.
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La ruta del dinero Kraisman, cada vez más impune. Sigue sin aclararse cómo fue que le abrieron una cuenta y le pagaron el sueldo a una empleada que no firmó contrato y no se presentó a trabajar y que dos dirigentes del peronismo quisieron extraer el dinero depositado. La vicepresidenta de la Legislatura, Nadia Fernández, sigue sin dar explicaciones de por qué la contrató a pedido de Guillermo Kraisman, sobre quien pesan varias condenas judiciales y el proceso de robar mercadería de un supermercado. El fiscal Anticorrupción Franco Mondino ni la citó a declarar como así tampoco a la vicegobernadora y titular del cuerpo, Myrian Prunotto. Mondino, antes de ser fiscal, fue asesor del bloque del PJ en la Legislatura y era monotributista.
Otros escándalos. La Legislatura sigue sin explicar por qué tienen partidas para cuestiones superfluas y a Prunotto se le van sucediendo los escándalos, como andar como un séquito que registra cada movimiento que hace o tener un equipo especial de policías de custodia. Una de las integrantes de la custodia, la comisario Bibiana Cabrera, tiene antecedentes y fue sumariada y apartada hace un tiempo de sus tareas.
Nuevas dudas. Todo el escándalo de los fantasmas ha hecho mirar hacia otra cuestiones, que parecen más espinosas. Más de uno se pregunta cómo se manejaron algunos negocios inmobiliarios, asignación de terrenos y cambios de uso de suelo cuando Prunotto fue intendenta de Juárez Celman durante tres períodos.