Yo ya venía caliente. La corrida de siempre para llegar a lo de mi cuñada: salir a las apuradas en medio del calor, que envolver el vitel toné, que cargar la bebida fría al horno del auto, que cuidar a la más grande que no LE DIGA al más chico LA verdad y nos amargue la noche a todas y todos. Y mi mujer dele con el celu y el Facebook. Me va diciendo frases y memes sobre la paz y yo a los bocinazos contra los que no corren como yo.
—Ahí manda un mensajito mi hermana: ESTA NOCHE NO SE HABLA DE POLITICA.
Yo la miré y ya arrancamos a discutir. Y mi mujer me cuenta que la hermana anda con eso del hoponopono y que han salido de crisis familiares poniendo cartelitos en el baño que dicen SOLO POR HOY. Y hoy se ve que nos hoponopeaba a todos con la política. “Ta bien” pensé yo. Y así le respondimos. Quedó en eso.
Al llegar la más grande mía dice (más bien, grita): miren el arbolito de la tía es de Macri porque tiene bolitas amarillas. “No hija, son doradas”. “Ja, se ve que la tienen entrenadita a la más grande”, dice el marido de mi cuñada. Yo, para cambiar de tema, le pregunto qué se estaba asando en la parrila. “Pollo, no viste lo que aumentó la carne, así a dónde vamos a parar con este. Seguro que al vitel toné lo hiciste con lengua y no con peceto”. Y mi suegra, como ve que la cosa se pone caliente (y le encanta) dice: “y qué planes tienen para las vacaciones”. “No, mamá, se terminaron los PLANES, basta de vaguear” le responde su hijita, mi mujer, la misma que me explicó lo del solo por hoy.
La cena pasó así: chicana va, chicana viene. Que Papá Noel es de river y Macri de Boca. Que el arbolito es verde dólar sin blue. “Tirá bien la cadena” le digo al más chico cuando lo veo que enfila para el baño y mi cuñada que le dice, “andá tranquilo que ya no hay más cadena”. Todos la miramos y ella nos aclara que ahora tienen botón. Que a las doce se convierte en calabaza.
Llegó la hora del brindis. Levantamos la mesa, subimos la radio: 10, 9, 8, 7, 6. Mi suegro grita MENOS MAL QUE NO ES SEIS SIETE OCHO… 5, 4, 3, 2, 1. Brindamos. FELIZ NAVIDAD. Los chicos abrieron regalos. Comimos esas cosas que solo se comen, acá, ahí. Nos fuimos llenos y contentos, riéndonos de nosotros mismos. El más chico se vino creyendo y nosotros también. Es que solo por hoy no hablamos de política.